Ocean Sole convierte tus flip flops en arte, para salvar el medio ambiente

Gracias por hacer click en la nota, eso significa que estás interesado en conocer el impacto que causan nuestras amadas flip flops en el medio ambiente. Siéntate, prepárate una bebida y pon atención porque esto te va a impactar.

Las sandalias y flip flops son populares, ¿cierto? Pero hay un gran problema detrás de ellas que la mayoría de usuarios desconoce. Comencemos por explicar su popularidad y finalicemos con las formas en las que podemos ayudar a solucionar un problema ambiental.

La popularidad de las flip flops y las sandalias

La popularidad de las sandalias va más allá de un tema relacionado con la moda. considerando la economía de millones de habitantes en el mundo, debes saber que más de tres mil millones de personas no pueden comprar otro tipo de calzado. 

Es una realidad que las sandalias son económicas, cómodas y fáciles de encontrar. En el caso del segmento de la población que no pueden permitirse otro calzado, estas deben repararse hasta que sean inservibles en su totalidad y es entonces cuando las desechan. 

Un par de flip flops tiene dos años de vida en promedio dependiendo del material y su uso. Sin embargo, a pesar de ser considerados “durables” son la causa de un gran problema de contaminación.

Los flip flops de caucho sintético no se desintegran, al contrario terminan contaminando playas y océanos en las costas de África Oriental. Seguro te preguntas por qué en África Oriental ya que las corrientes del océano arrastran la basura en dirección a esta zona y varias toneladas terminan en las playas de Kenia.

Ocean Sole convierte la basura en arte

Aquí es donde entra Ocean Sole, una empresa socialmente responsable que recicla los flip flops encontrados en las playas y vías fluviales de Kenia. En solo un año, han retirado alrededor de un millón de sandalias del océano y reciclado en piezas únicas, creando empleos en su comunidad. 

Julie Church, la fundadora de Ocean Sole, inspirada en los juguetes que los niños hacían con estos desechos, animó a las madres de la comunidad a recolectar, lavar y cortar las sandalias para crear productos coloridos para luego venderlos en los mercados locales. 

Hoy en día el proceso no es muy diferente, según Kenya Citizen TV, los flip flops limpios se ensamblan en bloques sólidos listos para ser tallados. El bloque se talla, se etiqueta y se empaqueta. El producto terminado se envía a todo el mundo a sus respectivos mercados para ser vendido.

Para crear las obras de arte, Ocean Sole recolecta los flip flops que llegan a la orilla de la playa, luego limpia cuidadosamente la suciedad y los clasifica por grupos de colores.

Ocean Sole tiene un impacto positivo en más de 1000 kenianos a través de la recolección de sandalias generando empleo directo. Proporcionan ingresos estables a casi 100 personas de bajos recursos en su empresa, reciclan más de un millón de sandalias al año, más de una tonelada de poliestireno al mes y salvan más de 500 árboles al usar flip flops en lugar de madera en la creación de esculturas y otros artículos.

Las esculturas son un colorido recordatorio del daño que se está haciendo a nuestro planeta; una declaración que fue enviada a la Semana de la Moda de Roma en 2008, al Museo Cultural Sueco en 2010, al Zoológico de Londres en 2013 y entregada al Papa Francisco en 2015.

Formas de colaborar con Ocean Sole y apoyar la causa

Mira a los artesanos en acción en un video de 8 minutos en YouTube y visita el sitio web para apoyar a Ocean Sole y sus acciones en pro del cuidado del medio ambiente y la generación de empleo. 

Para una experiencia más profunda, puedes reservar un viaje y unirte a las actividades del taller de Ocean Sole en su sitio web. Los guías te llevarán a través de las estaciones de trabajo donde se transforman los flip flops en hermosas esculturas, ofreciendo información sobre su impacto ambiental.

“Lo que más me ha divertido ha sido la transformación que tuve que hacer de ROI, que significa retorno de inversión, a ROI, que significa retorno del impacto en nuestros compromisos de conservación y comunidad. Además, la autonomía de tener mi propia empresa y poder crear una cultura de colaboración, diversión e impacto ha sido lo más beneficioso para este esfuerzo”.

Ocean Sole tiene un gran reconocimiento mundial, su fama en redes sociales surgió a partir de videos como el que compartió 60 Second Docs sobre uno de sus artistas de flip flops que alcanzó a más de 170 millones de personas en múltiples plataformas. También un video de Business Insider sobre los esfuerzos de Ocean Sole que ha sido visto más de 8.8 millones de veces solo en YouTube, así como la cobertura en CNN, la televisión alemana, el canal NatGeo y más. 

Ocean Sole, y Smith dice que hay interés en exportar el modelo desde lugares tan lejanos como México y Nepal. Y hay pocas probabilidades de que los artesanos se queden sin materia prima mientras nuestra adicción a los flip flops continúe.

«Creo que es hora de que empecemos a buscar un zapato alternativo, o un material alternativo, para satisfacer esa necesidad de moda», argumenta Smith. «Nuestros productos necesitan evolucionar».

La compañía alemana de ropa deportiva Adidas ya está experimentando con materiales renovables. Su colaboración de zapatillas con Parley for the Oceans, utilizando redes de enmalle de mar profundo ilegales y plástico reciclado del océano, recibió elogios entre la comunidad de diseño el año pasado y fue nominada a premios.

Además, Adidas también está experimentando con un material llamado AMSilk, creando un zapato biodegradable empaquetado junto con una solución enzimática, para que los propietarios puedan disolver sus zapatillas cuando terminen de usarlas.

Puede pasar un tiempo antes de que esta tecnología llegue a los pies de tres mil millones de personas. Mientras tanto, Ocean Sole está preparado.